Si aislamos las células de la sangre, nos queda el plasma, que es un líquido claro, transparente y ligeramente amarillento.
En su composición se pueden distinguir:
Agua:
Constituye el 90-92 %. Hace que el resto de los componentes de la sangre puedan fluir a través de los vasos sanguíneos, además permite mantener constante la temperatura de la sangre cerca de los 36,5° C.
Sales minerales:
Cloruro Sódico (ClNa): tiene como función mantener el plasma isotónico respecto a las células del organismo.
Cloruro Potásico (ClK) y Cloruro Cálcico (Cl2Ca) = intervienen en los fenómenos de carácter iónico.
Bicarbonato Sódico (CO3HNa) = actúa como sustancia amortiguadora, manteniendo una ligera alcalinidad del medio interno.
Proteínas:
Actúan en fenómenos osmóticos, de transporte el Fibrinógeno es una de esas proteínas e interviene de manera importante en el fenómeno de la coagulación.
Otras Sustancias:
Glucosa, Colesterol, Acido Urico, Hormonas, etc...